Los medicos II – La consulta.
Vamos construyendo poco a poco nuestra consulta, y cada vez está más completa, lo que nos proporciona vivencias y experiencias cada vez más significativas.
En este sentido, agradecemos la colaboración de las familias al aportar todo tipo de materiales relacionados con este campo tan interesante, que nos han ofrecido muchos aprendizajes. Por ejemplo, hemos visto libros de anatomía animal y humana; hemos visto vendajes especiales para animales y otros para personas; pesos para poder pesar a los pacientes; metros para medir la estatura; fichas médicas…
El niño, habla desde la propia experiencia y vivencia, con todo lo que ello conlleva… nos habla desde la seguridad de la persona que sabe muy bien de lo que habla y que lo transmite a aquél con que lo comparte. De esta manera, sus iguales, interiorizan su saber y su experiencia de una forma muy significativa, impregnados y fascinados por lo vivido.
Después de la asamblea, todo el grupo de mayores decidió ir a colocar todo en el consultorio y jugar con ello.
“¿Quién es el médico?”, “¡Yo!”, “Yo el ayudante.”, “Yo el enfermo.”, “Y yo”, “Y yo”…Surgieron demasiados enfermos. “No cabemos todos”. “Los enfermos tienen que esperar en la sala de espera”, “¿Donde es la sala de espera?”, “Aquí.” (Los pacientes se meten dentro del armario)
“Ahora yo soy el médico” Y volvían a pesar, medir, escribir el nombre, hacían el diagnóstico y pasaban receta. ¿Y los que no escriben? Se buscan sus propias estrategias, preguntan a los compañeros, copian de los nombres de la tabla de presencias…Realmente ha sido una mañana de mucho trabajo en la consulta médica.