Aprender Jugando
Donde el Aprendizaje Basado en el Juego Cobra Vida
En Colibrí, cada rincón es un universo esperando ser explorado
Nuestros espacios están diseñados para fomentar un aprendizaje basado en el juego, estimulando la curiosidad, autonomía y creatividad de cada peque.
Presentamos áreas temáticas únicas, organizadas y equipadas con materiales que inspiran imaginación y promueven la iniciativa de los niños y las niñas.
El resultado es un entorno donde los niños y las niñas aprenden mientras juegan, interactúan socialmente y se mueven con libertad.
- Área de Juego Estructurado: Combina atención y orden con el método Montessori y materiales didácticos, abarcando lectura, escritura, ciencia y matemáticas. Además, los cuentos del día enriquecen la experiencia con narrativas mágicas.
- Área de «La Casita» y Juego Simbólico: Un espacio de imaginación donde cocinas de juguete, muñecos y construcciones permiten a las niñas y los niños explorar, imitar y crear historias.
- Área de Plástica: Un entorno artístico para la expresión a través de la pintura, el dibujo y la escultura, facilitando la exploración artística individual.
- Sala de Módulos de goma espuma: Un área donde la energía y la acción se manifiestan en un entorno seguro y atento al cuerpo.
- Área de Psicomotricidad: una propuesta preventiva que aflora en el espacio dedicado al desarrollo armónico en el placer del hacer, de jugar, de pensar y de la alegría de ser, que transforma a los niños y las niñas hasta expresar todo el potencial que llevan en su interior.
- Espacio Exterior: Un jardín que celebra la naturaleza, con juegos, un huerto y rincones llenos de aventura y aprendizaje.
Colibrí es un lugar donde el aprendizaje basado en el juego es parte integral de la experiencia diaria, proporcionando un entorno donde cada pequeño y pequeña es el protagonista de su viaje de descubrimiento.
Aprender jugando es una forma de vida
En Colibrí, educación infantil El Escorial, cuidamos cada detalle para promover el aprendizaje a través del juego.
Nuestra misión es nutrir la curiosidad, la independencia y la inventiva de cada pequeño y pequeña.
Ofrecemos espacios temáticos excepcionales, organizados y equipados con materiales que despiertan la imaginación y fomentan la iniciativa de nuestros pequeños exploradores.
El resultado es un ambiente vibrante donde los niños y las niñas no sólo se divierten, sino que también obtienen conocimiento, interactúan entre sí y se mueven con total libertad, creando así experiencias educativas innovadoras basadas en una educación alternativa.
En Colibrí, aprender jugando es el vehículo principal para el crecimiento y desarrollo integral de nuestros peques.
JUEGO ESTRUCTURADO PARA APRENDER JUGANDO
Aprender de manera lúdica mediante el juego estructurado implica participar en actividades que se llevan a cabo siguiendo reglas predefinidas o un conjunto de normas específicas.
Los beneficios que este tipo de juegos aporta a los niños y las niñas en nuestra institución Colibrí son diversos y significativos:
- Desarrollo del respeto por las normas. Al participar en juegos estructurados, los niños aprenden la importancia de respetar y cumplir con las reglas establecidas, lo que fomenta la disciplina y el entendimiento de la importancia del orden en diversas actividades.
- Fomento de la colaboración. Estos juegos promueven la interacción entre los niños, incentivando la colaboración y el trabajo en equipo para alcanzar objetivos comunes. A través de la cooperación, los pequeños aprenden a valorar las habilidades y contribuciones de los demás.
- Estimulación del pensamiento estratégico. Los juegos estructurados requieren que los niños piensen de manera estratégica para alcanzar sus objetivos. El proceso de planificación y ejecución de estrategias les ayuda a desarrollar habilidades cognitivas, como la resolución de problemas y la toma de decisiones, de manera lúdica y divertida.
- Aprendizaje de la resiliencia. Al enfrentarse a situaciones donde ganar o perder es una posibilidad, los niños desarrollan habilidades para lidiar con la frustración y aceptar la derrota de manera constructiva.
- Promueve el valor de saber compartir. Participar en juegos estructurados brinda a los niños la oportunidad de compartir tanto recursos materiales como experiencias con sus compañeros. Este acto de compartir y aprender jugando fortalece los lazos sociales y promueve la generosidad y el sentido de comunidad.
AREA DE JUEGO SIMBOLICO PARA APRENDER JUGANDO
En nuestra área de “La Casita” y “Juego simbólico”, los niños utilizan su imaginación para representar situaciones y personajes, a menudo imitando el mundo real o creando escenarios completamente ficticios.
Los beneficios del juego simbólico para los niños y las niñas en nuestra institución Educativa El Escorial son diversos y fundamentales para su desarrollo.
El juego simbólico estimula la creatividad y la imaginación, ayudando a los pequeños a desarrollar habilidades cognitivas como la resolución de problemas, la planificación, la organización y la toma de decisiones.
Además, al asumir roles y experimentar diferentes situaciones, los niños pueden explorar y expresar sus emociones de manera segura. Esto les permite comprender mejor sus propios sentimientos y los de los demás.
El juego simbólico fomenta la interacción social y la cooperación entre los niños: aprenden a negociar, compartir ideas, colaborar y resolver conflictos mientras juegan juntos, según la pedagogía activa.
Por otra parte, el juego simbólico a menudo implica movimiento físico, lo que contribuye al desarrollo de habilidades motoras gruesas y finas, así como al desarrollo de la coordinación y el equilibrio.
AREA DE PSICOMOTRICIDAD Y APRENDEN JUGANDO
La psicomotricidad es una herramienta educativa y terapéutica esencial que busca fomentar el desarrollo integral de los niños mediante el movimiento y la expresión corporal.
¿Qué beneficios aporta nuestra área de psicomotricidad a los niños y las niñas?
- Favorece la adquisición del esquema corporal, permitiendo al pequeño tomar conciencia y percepción de su propio cuerpo.
- Aborda y desarrolla distintos patrones motores como la marcha, la carrera, el salto, el lanzamiento y la recepción.
- Contribuye al control y dominio del cuerpo, ayudando al niño a regular y adaptar sus movimientos corporales.
- Fortalece aspectos como la lateralidad, el control postural, el equilibrio, la coordinación y la ubicación en el espacio y en el tiempo.
- Estimula la percepción y discriminación de las cualidades de los objetos, así como su exploración y uso.
- Fomenta la creación de hábitos que facilitan el aprendizaje, mejorando la memoria, la atención, la concentración y la creatividad.
- Introduce nociones espaciales básicas como arriba-abajo, izquierda-derecha, adelante-atrás, cerca-lejos, entre otras, a partir de la relación del niño con su propio cuerpo.
- Refuerza conceptos básicos como color, tamaño, forma y cantidad mediante la interacción directa con el entorno.
- Promueve la integración social a través del juego grupal y la interacción con compañeros.
- Afianza el autoconcepto y la autoestima del niño al ayudarlo a sentirse emocionalmente seguro, al conocer sus propias capacidades y limitaciones.
En Colibrí contamos además con un área de plástica, una sala de módulos de goma espuma y un espacio exterior de jardín que, junto al área de juego estructurado, el área de juego simbólico y el área de psicomotricidad, complementan y fortalecen nuestro espacio para que cada peque pueda Aprender Jugando.